U16295 

Enlace OPAC

Esta nueva obra del P. Antonio Orbe, profesor de la Universidad Gregoriana de Roma y especialista, de fama reconocida, en la teología del siglo II, reúne con impresionante seriedad científica y plenitud no alcanzada hasta ahora todos los elementos ireneanos relativos a las parábolas del Evangelio, a fin de restituir, con extraordinaria objetividad, la atmósfera de la teología del siglo II.
La obra es nueva, porque se le había ocurrido abordar ex profeso tales elementos, particularmente difíciles por su antigüedad y por venir de campos heterogéneos, de tradiciones autónomas, doctrinalmente fijas, sólo revelables a fuerza de análisis comparativo.
A la novedad hay que agregar la riqueza. El estudio de las parábolas conduce a una paradoja. Sobre ellas se funda gran parte de la dogmática (eclesiástica o heterodoxa). Y en tal dogmática ha de apoyarse el lector para entender las parábolas en el siglo II. Entenderlas una a una es ganar terreno a la misteriosa economía de Cristo.

U16344 

Enlace OPAC

Esta edición del tratado de San Ambrosio sobre el Evangelio de San Lucas responde al propósito de la Biblioteca de Autores Cristianos de ofrecer en lengua castellana, juntamente con el texto original, las principales obras de la Patrística oriental y occidental. Treinta volúmenes ya publicados dan fe de la obra realizada por la BAC en este campo.
Las enseñanzas del Concilio Vaticano II han dado nueva actualidad a este esfuerzo editorial, al recomendar y urgir al estudio de los Santos Padres y la lectura fructuosa de sus obras.
San Ambrosio es hoy prácticamente desconocido para el gran público español. Por ello, la BAC lo incorpora a su colección. El P. Manuel Garrido Bonaño, O. S. B., ya conocido de nuestros lectores, ha hecho una traducción moderna, cuidada y elegante del comentario ambrosiano al Evangelio de San Lucas. Se reproduce el texto latino de acuerdo con los últimos resultados de la crítica textual.
Al presente volumen seguirá otro, en el que se recogerán escritos exegéticos y de espiritualidad del gran Obispo de Milán.
Al ofrecer a sus lectores esta primera versión moderna de San Ambrosio, la BAC considera que rinde un nuevo servicio al desarrollo cultural y religioso del mundo de habla castellana.

U16343 

Enlace OPAC

Leonor, heredera del ducado de Aquitania, mujer de Enrique II de Inglaterra, madre de Ricardo Corazón de León y de Juan sin Tierra; María Magdalena, la del evangelio, que por azarosas circunstancias aparece enterrada en Vélazay, Francia, y se transforma en emblema de un tipo de mujer; Eloísa, aristócrata del norte de Francia, intelectual, amante de Abelardo y finalmente abadesa; Iseo, heroína inicialmente silenciosa de la leyenda de Tristán e Isolda, y tres mujeres más permiten que Duby precise aspectos principales que definían en el siglo XII la situación de lo femenino en el orden del mundo. Una definición con largas raíces y prolongado y actual alcance, como podrá apreciar quien lea este libro decididamente apasionante. Algunas figuras de mujeres aparecen en los escasos vestigios de una literatura genealógica que se difundió en Francia a fines del siglo XII. Fugitivas e indecisas, estas siluetas femeninas, no obstante, permiten entrever cómo vivieron en esos tiempos las damas, las esposas de los señores.
A sus descendientes, caballeros o sacerdotes, les complacía imaginarlas dóciles, sumisas, más honradas por sus propios méritos que por la gloria del esposo y de los hijos que trajeron al mundo. De hecho reinaron al interior de la casa, y las que sobrevivieron a sus maridos, numerosas y ya libres, se volvieron verdaderamente dominantes. "En el siglo XII, los sacerdotes empezaron a hablar con mayor frecuencia acerca de las mujeres, a hablarles a ellas también, y a veces las escuchaban. Las palabras que nos han llegado aclaran un poco mejor lo que investigo, y que cuesta tanto percibir: cómo trataban a las mujeres en esos tiempos.
Al término de la investigación, las mujeres del siglo XII me parecen más fuertes de lo que imaginaba, tan fuertes que los hombres intentaban debilitarlas mediante las angustias del pecado. Creo poder situar hacia 1180 el momento en que la condición femenina mejoró bastante, en que caballeros y sacerdotes se acostumbraron a discutir con ellas, a ampliarles el campo de la libertad, a cultivar esos dones particulares que las acercan más a lo sobrenatural. Y queda más clara la mirada que los hombres dirigían entonces a las mujeres. Ellas los atraían y les provocaban temor. Seguros, no obstante, de su superioridad, se apartaban de ella o bien las maltrataban. Son ellos, finalmente, los que les fallaron."

U16258 - U16259 - U16260

Enlace OPAC