La doctrina de la creación ex hihilo no existe para afirmar que hubo un tiempo o un estado en el que un Ser llamado Dios estaba solo y "de la nada" hizo el mundo -aunque podía no haberlo hecho. Esto es caer en una red de especulación mitopoétidca. Lo que esta doctrina afirma es que no hay nada en todo el ámbito de la experiencia que no pueda ser interpretada en términos de Dios o que requiera cualquier otro fundamento. Es decir, no hay ningún aspecto de la historia o de la naturaleza, por reacio que sea a las categorías personales, que no deba ser considerado últimamente en términos de espíritu, libertad y amor. Desde el principio, afirma el creyente, éste es un universo "personalizante", en el sentido de que el todo debe ser entendido como un proceso en favor de la personalidad y de más allá.
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