Hay varios sacerdotes en el Gobierno de Reconstrucción Nacional de Nicaragua: desde el triunfo de la revolución sandinista en julio de 1979.
El pueblo cristiano y revolucionario que los mira desde dentro de su historia, ve bien que esos siervos de Dios sirvan al pueblo de su liberación.
Hay sectores políticos, cristianos y eclesiásticos que se oponen a la revolución y acusan a estos sacerdotes de traidores, vendidos, rebeldes.
Los obispos les han pedido que renuncien a sus cargos en el gobierno. Mientras no renuncien, no pueden celebrar misa.
¿Qué razones tuvieron estos sacerdotes para aceptar esos cargos? ¿Por qué han seguido ahí, exponiéndose a que los condene la jerarquía de la Iglesia y los mate la contrarrevolución?
¿Qué relación existe en sus vidas entre la causa de Cristo y la causa del pueblo, entre el Evangelio y el cambio de estructuras, entre el Reino de Dios y la revolución?
¿Qué efectos causa en su fe cristiana la lucha del pueblo y qué incidencias tiene en el proceso revolucionario su fe en el Dios de Jesús?
Ha escuchado el testimonio personal de 3 sacerdotes con cargos en el gobierno revolucionario. Ofrezco estos testimonios a la Iglesia, a todos los cristianos y a los revolucionarios del mundo entero. - Teófilo Cabestrero. Managua, Nicaragua.
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