La palabra "manipulación" admite varios matices y resonancias, según el contexto. Puede indicar los logros más beneficiosos de la habilidad y del poder humano sobre las cosas; pero también puede indicar el uso de los medios más degradantes e insidiosos para el envilecimiento de la vida y para sojuzgar a otros. Bajo los varios usos de esta palabra late un tremendo problema, el de la idea que tiene de sí el hombre en una civilización técnica altamente evolucionada que debe enfrentarse con la cuestión de hasta qué punto los métodos y actitudes pueden ser aplicados a la estructuración de la sociedad y al ámbito de la vida y de las relaciones humanas.
En esta obra sobre los aspectos éticos de la manipulación médica, genética y del comportamiento, Bernhard Häring estudia problemas del futuro, con la convicción de que el futuro ha comenzado ya. Busca límites éticos en el espíritu de un debate desapasionado en torno a la libertad humana. Trata de liberar a nuestra sociedad de todos los tabúes y prejuicios que podrían entorpecer el progreso con el propósito de crear condiciones de vida que propicien el desarrollo de la libertad de cada uno.
Los problemas suscitados por la manipulación interesan tanto a los que practican la profesión médica como a los científicos en general. Interesan a todas las personas dedicadas a la educación, a todos los legisladores y a cuantos quieran participar en el proceso de decisiones y de sensibilización de las conciencias en torno a estas cuestiones fundamentales que se presentan ante nosotros y que deben ser acometidas.
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