Los más graves problemas, tanto internacionales como nacionales, están, de algún modo, resumidos en un cuadro esquemático. Estos esquemas no pretenden agotar las enormes implicaciones que en ellos subyacen. Si bien tienen la ventaja de la claridad y de la síntesis, tienen también la desventaja de la excesiva simplificación o generalización del problema. Hay que tomarlos como simples "esquemas" que no pretender resumir y "visualizar" los grandes desafíos que deben cuestionar nuestro pensamiento y nuestra acción.
Como el presente trabajo está orientado principalmente a los promotores y agentes de pastoral, varios gráficos tratan de desarrollar algunas ideas que pueden iluminar y motivar nuestro compromiso cristiano.
U14581