El futuro se construye con el coraje que tengamos en hacer el presente. Hoy estamos frente a este desafío. Ingemar Hedström lo ha asumido y contribuye desde su compromiso y responsabilidad en ayudarnos en la reflexión sobre los peligros y alcances del deterioro ecológico desde una visión global de los problemas que afectan a la humanidad, mostrándonos los hechos concretos y planteando propuestas hacia la búsqueda de soluciones.
Las respuestas están en la capacidad de desarrollar la conciencia crítica y en la organización popular, en sumar esfuerzos, los organismos humanitarios, iglesias, en la acción conjunta de promover la defensa de la vida, en provocar cambios y generar alternativas, asumiendo el desafío que la situación actual de la humanidad nos plantea. Así lograremos recuperar las golondrinas, las flores con perfume, relaciones más justas entre el Sur y el Norte, Este-Oeste, y Sur-Sur. Las utopías hay que vivirlas para hacerlas realidad, necesitamos esa dosis de idealismo práctico y la fuerza espiritual para enfrentar, compartir y transformar un mundo cada día más complejo, individualista y competitivo, en lograr que la solidaridad vaya abriendo la puerta de la esperanza a los enamorados de la vida.
U14221